Cómo sobrevivir a la vuelta al cole siendo madre trabajadora
- Jacqueline Thomas
- 2 de septiembre de 2022
- 4 minutos de lectura
Actualizado: 26 de abril de 2024

Me da pavor la vuelta al cole; no es que vaya a extrañar terriblemente a mis hijos, sino más bien un cambio de ritmo de vida. El respiro relajado del verano se cambia por una estructura y un horario rígido en casa. Tiene que ser así, o la alocada lista de actividades de vuelta al cole, deportes de otoño y clubes acabará con mi cordura.
Esta época del año también trae consigo la tarea de asegurar que todos estén preparados para la escuela con ropa, útiles, visitas al pediatra y el examen anual de la vista. Todos los años digo que empezaré este proceso en julio para asegurarme de empezar con tiempo, pero por alguna razón no lo hago. Este año, una mudanza a otro país arruinó mis planes. Ahora me encuentro en la ya habitual presión del tiempo para asegurarme de que los niños estén listos para la escuela. Dicho esto, quería compartir mis 5 mejores consejos sobre cómo he aprendido no solo a sobrevivir, sino a prosperar en esta época tan ajetreada del año.
1. Respira profundamente, un instante… solo haz una pausa por un segundo.
Sé que parece contradictorio detenerse cuando la vida parece ir a mil por hora, pero este paso es crucial. Como profesionales y cuidadores, parece que nuestra atención está constantemente en demanda. Me parece fundamental parar lo que estoy haciendo cuando me siento abrumado. Necesito una pausa, aunque sea un instante. Salgo de la habitación, busco afuera si puedo, y respiro hondo. Esta pausa simple y rápida me ayuda a reiniciarme y puedo evaluar, organizar y poner en práctica mi lista de tareas.
Deja el teléfono atrás cuando te alejes y minimiza las distracciones si puedes. Es hora de centrarte. Respira hondo varias veces para que tu cuerpo reciba el oxígeno necesario. Este breve pero impactante gesto es fundamental, sobre todo cuando me preparo para una tarea importante, como las compras de vuelta al cole para dos niños muy exigentes. También utilizo esta técnica durante el curso escolar, como cuando recibo la temida llamada de la enfermera del colegio mientras estoy preparando una presentación. Haz una pausa. Respira hondo varias veces. Reconcéntrate. Ahora estás listo para la acción.
2. Prioriza preguntando: ¿Importará dentro de 20 años?
Uno de los mejores consejos que recibí fue aplicar la pregunta: "¿Importará esto dentro de 20 años?" cuando me siento abrumado.
Es tan fácil sentirse abrumado por las tareas y listas de pendientes que puede ser difícil saber por dónde empezar. Cuando me siento abrumado con mi lista de pendientes, me planteo mi pregunta. Luego, la desgloso aún más: ¿importará esto dentro de 10 años, 5 años, las próximas dos semanas, etc.? Este consejo me permite priorizar lo verdaderamente importante cuando parece que tengo un millón de cosas por hacer. También me permite organizar mis tareas más urgentes. Y lo más importante, me permite tachar todas las pequeñas cosas que podrían parecer importantes, pero que, al mirarlas con perspectiva, no lo son. ¡Mira, ya estamos tachando cosas de esa lista!
3. Para ser lo mejor de ti, nútrete y cuídate.
Como madre trabajadora, me costó un poco aprender esto. Sin embargo, al hablar con otras madres trabajadoras, parece ser un área en la que muchas tenemos dificultades. El autocuidado es vital. Pienso en el autocuidado como el discurso de seguridad en un avión: "Ponte la máscara de oxígeno antes de ayudar a otros a ponerse la suya". El autocuidado es el equivalente a tu máscara de oxígeno. Asegúrate de que tus necesidades estén cubiertas para que puedas ayudar a cubrir las de los demás.
Cuidarse no tiene por qué ser un día de spa o un fin de semana de chicas. Puede ser algo tan pequeño como tomar tu café favorito, dedicarle diez minutos a un buen libro, dar un paseo o sumergirte en la bañera. Haz lo que te recargue las pilas, aunque solo tengas cinco minutos a la vez. Consentirte con pequeños placeres solo para ti es crucial, sobre todo cuando sientes que no tienes tiempo suficiente. Me ayuda a ver que, en medio de la locura de la vida, yo también importo. Recuerda ponerte la máscara de oxígeno primero, y así tendrás las pilas cargadas para ayudar a los demás.
4. Ponlo en el calendario
Crea un calendario compartido para la familia o el cuidador en línea. ¡Esto me cambió la vida! Antes era de la vieja escuela, con el gran calendario de papel en la cocina. Una amiga me enseñó el concepto de calendario compartido, ¡y me ha cambiado la vida! Todos en casa son responsables de anotar sus eventos en el calendario compartido. También anotamos aquí las actividades académicas importantes. Se acabaron las carreras frenéticas a las 9 p. m. a la tienda de manualidades para comprar materiales para un proyecto que se entrega al día siguiente. Comparte las fechas clave con otros cuidadores de tu casa.
También apunto eventos importantes de la escuela y la familia en mi calendario laboral. Puede parecer redundante, pero me ayuda ver esas fechas clave repetidamente. Además, me permite integrar estos eventos en mi vida profesional siempre que puedo.
La conclusión es que una entrada en el calendario es como un favor para ti misma: chica, ¡anota esas fechas en el calendario!
5. Pide ayuda
Pide ayuda si la necesitas. Por favor, vuelve a leerlo, haz una pausa y asimílalo. Dilo en voz alta si es necesario y pide ayuda si la necesito.
Lo admito, antes era terrible con este consejo. Me costó mucho aprenderlo. Me angustiaba mucho que las cosas no se hicieran como yo quería, o que me vieran como inferior por no poder hacerlo solo. A veces, es más importante terminar la tarea que que se haga según mis especificaciones exactas. ¡Delega, delega, delega!
A veces lo completo es mejor que lo perfecto… a veces.
Espero que estos consejos ayuden a otras madres trabajadoras y cuidadoras durante esta época tan loca del año. Nuestros hijos son pequeños solo por un tiempo, y como todo en la vida, esta etapa pasará. Aunque sea una locura, no la cambiaría por nada, y estoy segura de que ustedes tampoco. Asegúrense de parar y disfrutar de estos momentos porque, antes de que nos demos cuenta, los niños se irán a la universidad.
Escrito por: Jacqueline Thomas
Comentarios